Todos hemos sufrido en más de una ocasión los problemas que produce una web con una mala usabilidad: páginas en las que no encuentras la información que has ido a buscar, tiendas en las que no puedes comprar y webs en las que resulta complicadísimo registrarte, todos estos problemas no ocurrirían con un buen estudio de usabilidad, en este post te mostraremos cómo mejorar la usabilidad de tu web.
Pero, ¿qué es exactamente la usabilidad?
La usabilidad se define como la facilidad con la que las personas pueden utilizar un objeto fabricado por humanos para conseguir el objetivo para el que ha sido diseñado. En el caso de una página web podemos definirla como la facilidad con la que los visitantes de un sitio pueden utilizar esa página web para alcanzar el fin para el que ha sido diseñada.
Algunas empresas e instituciones invierten miles de euros en el diseño de páginas web pero se olvidan de hacer un estudio de usabilidad que garantice que la página va a servir para lo que ha sido diseñada, un gran error que podemos evitar teniendo en cuenta la usabilidad en el proceso de diseño de nuestra página web. Como especialistas en diseño web en Zaragoza, os contamos algunas de las cuestiones que deben tenerse en consideración.
Estudio de usabilidad
Para comenzar con el estudio de usabilidad tenemos que definir 3 tipos de objetivos dentro de una web:
- Lo que el visitante quiere hacer en nuestra página: tener una camisa, asistir a un evento, recibir información sobre cierto tema.
- Lo que nosotros queremos que haga: comprar una camisa, comprar entradas para un evento o registrarse en la plataforma.
- Lo que nuestra web permite hacer: pagar, registrarse, buscar.
Para facilitar estas acciones deberemos dejar muy claro al usuario dónde puede interactuar, y destacar de forma clara los “botones” en los que puede realizar estas acciones.
Según el objetivo que busquemos podemos dividir las acciones en cuatro tipos:
- Determinantes: Acciones de conversión como“pagar“, “comprar“, “enviar“, “descargar“.
- De enganche: Previas a la compra, como “probar“, etc.
- Transitivas: El tipo de acciones que debe realizar el usuario antes de las determinantes, como “continuar“, “avanzar“ o“saltar“.
- De ampliación: Para continuar una acción, como por ejemplo “seguir leyendo“, “ver más“, etc.
Una vez tengamos definidos objetivos y acciones ya podemos pasar a diseñar una página web en la que el usuario alcanzará un alto grado de satisfacción navegando por ella, para lo que además tendremos que tener en cuenta:
- Estructura bien los contenidos, de forma organizada y con familias y subfamilias.
- Crea un menú de navegación de calidad, con los contenidos agrupados.
- Reduce al mínimo el número de clicks para que el usuario consiga hacer lo que desea.
- Utilizar colores estándar para los enlaces, está demostrado que el azul subrayado es el que mejor funciona, ¡si algo funciona no lo cambies!
- Crea botones de llamada a la acción, call to action, visibles y con colores cálidos, como el naranja o rojo.
Esperamos que estos consejos os ayuden a mejorar la usabilidad de vuestra web, aplicadlos si os parecen interesantes y contadnos si os han ayudado a mejorar la experiencia de navegación de vuestros visitantes.
